Hidropesía en peces medaka: causas, síntomas tempranos y tratamiento
La hidropesía en peces medaka es una de las enfermedades más graves que pueden afectar a esta especie. Se trata de una patología difícil de curar y que, en muchos casos, puede resultar mortal si no se detecta a tiempo. Por este motivo, es fundamental que los criadores y aficionados conozcan sus causas, los primeros síntomas y las opciones de tratamiento disponibles.
La hidropesía también es conocida como enfermedad de las escamas levantadas, ya que cuando la afección avanza, las escamas del medaka se erizan y el pez adquiere un aspecto similar al de una piña. Esto indica que la enfermedad se encuentra en una fase avanzada y que el pronóstico ya no es favorable en muchos casos.
¿Qué es la hidropesía?
La hidropesía es una condición en la que se acumula líquido en el interior del cuerpo del pez, concretamente en la zona situada bajo las escamas, lo que provoca que estas se levanten. Esta acumulación de líquidos suele estar relacionada con infecciones bacterianas o con fallos en órganos internos como el hígado o los riñones.
Los peces medaka pueden padecer distintas enfermedades, pero la hidropesía es considerada una de las más complicadas de tratar. Cuando los síntomas se hacen evidentes a simple vista, la enfermedad suele estar ya bastante avanzada. Por ello, detectar las señales tempranas es clave para aumentar las probabilidades de recuperación.
Síntomas iniciales de la hidropesía en peces medaka
En las primeras fases, la hidropesía no presenta síntomas exclusivos, lo que dificulta su diagnóstico. Los signos iniciales pueden confundirse fácilmente con otras enfermedades comunes del medaka. El pez puede comenzar a nadar de forma extraña, mostrarse más lento de lo habitual o permanecer en el fondo del estanque. En algunos casos, se observa un ligero hinchazón del cuerpo o zonas enrojecidas.
También es frecuente que el medaka deje de comer, respire cerca de la superficie o se frote contra el sustrato. Si se observa con atención, puede notarse que algunas escamas comienzan a levantarse ligeramente, aunque todavía no sea muy evidente.
Cuando la hinchazón es clara y el cuerpo parece haber aumentado de tamaño de forma repentina, suele indicar que la hidropesía está progresando rápidamente.
Causas de la hidropesía en peces medaka
La hidropesía en medaka puede tener dos orígenes principales. Uno de ellos es la infección por bacterias del género Aeromonas. Estas bacterias están presentes de forma natural en el agua dulce y normalmente no suponen un problema. Sin embargo, cuando el pez se encuentra debilitado por estrés, heridas, bajas temperaturas o mala calidad del agua, la infección puede desarrollarse y desencadenar la enfermedad.
En los casos provocados por Aeromonas, es común observar congestión o enrojecimiento en el cuerpo del pez. Aunque estas bacterias se multiplican mejor en temperaturas de entre 25 y 30 °C, la hidropesía aparece con mayor frecuencia en invierno y principios de primavera, cuando el sistema inmunológico del medaka está más debilitado.
La segunda causa está relacionada con trastornos internos, como la acumulación de grasa en el hígado y los riñones. Esto suele producirse por una alimentación inadecuada o exceso de comida. En estos casos, el cuerpo del pez puede verse más transparente y, a diferencia de las infecciones bacterianas, no suele haber enrojecimiento visible.
¿La hidropesía es contagiosa?
Una de las dudas más comunes entre los criadores es si la hidropesía puede transmitirse a otros medaka. La respuesta es clara: no se trata de una enfermedad contagiosa. No obstante, es posible que varios peces desarrollen la enfermedad al mismo tiempo si comparten un entorno inadecuado.
Una mala calidad del agua, cambios bruscos de temperatura o una alimentación incorrecta pueden debilitar a todos los peces del acuario, provocando que aparezcan casos simultáneos. Por esta razón, aunque no sea contagiosa, es imprescindible revisar y mejorar el entorno de cría cuando se detecta un pez enfermo.
Tratamiento de la hidropesía en peces medaka
Es importante ser realistas: la hidropesía avanzada suele ser incurable. Sin embargo, cuando se detecta en una fase temprana, existen posibilidades reales de recuperación. El primer paso siempre debe ser corregir cualquier problema en el entorno del pez, como agua sucia, baja temperatura o estrés.
Los baños medicados con fármacos antibacterianos han demostrado ser uno de los tratamientos más efectivos, especialmente cuando la causa es una infección bacteriana. En muchos casos, los síntomas comienzan a remitir en aproximadamente una semana.
El tratamiento puede reforzarse añadiendo sal al agua, ya que el efecto osmótico ayuda a reducir la acumulación de líquidos en el cuerpo del pez. La combinación de baños de sal y medicamentos suele ofrecer mejores resultados que aplicar solo uno de los métodos.
¿Son efectivos los baños de sal y el azul de metileno?
En casos leves, cuando las escamas apenas comienzan a levantarse, un baño de sal puede ser suficiente para revertir la hidropesía. La sal ayuda a regular el equilibrio osmótico del pez y a disminuir la hinchazón.
El azul de metileno es otro tratamiento ampliamente utilizado en peces medaka debido a su baja toxicidad. Este compuesto puede eliminar patógenos sin dañar gravemente las células del pez, lo que lo hace útil en las fases iniciales de la enfermedad. Sin embargo, su efecto es limitado en casos avanzados.
Además, el azul de metileno elimina también las bacterias beneficiosas del acuario, por lo que se recomienda realizar cambios de agua frecuentes y utilizarlo preferentemente en recipientes de cuarentena.
Cuando la hidropesía está más avanzada, tratamientos más potentes como Backtopur Direct ofrecen mejores resultados que el azul de metileno por sí solo.
